Hoy es una de esas noches en que no puedo dormir por pensar en ti. Lo confieso ha sido muy difícil, solo pienso en desaparecer.
Tal vez ya no quieras saber de mi. Paranoia me ataca de nuevo, me siento solo otra vez. Quiero una excusa para irme. Solo es cuestión de tiempo. Siento que ya no puedo ni conmigo
Hoy si me siento mal. Espero que solo sea una mala pasada mental, de esas que hace tiempo que no me daban. Hoy parece que es uno de esos días donde soy discriminado por no traer dinero en la bolsa. Y aquí estoy quejándome de nuevo de lo mal que estoy por mis propias desiciones. No sé hasta cuando seguiré con esta mentira de que todo está con madre, y que no pasa nada.
Suerte no me dejes ahora que más te necesito eres lo único que tengo. Veo a lo lejos una puerta medio avierta, incluso es una oportunidad de mil caminos que podría seguir solo yo sé mi plan. Ya se rodar en el camino. Solo falta aprender ir cada día más lejos. Al menos puedo dormir sabiendo que ya todo se acomodó. Ahora sí ...
Podré partir si me abandonas, y todo será perfecto. Solo yo y muchas sendas que recorrer. Lo peor que puede pasar es que me topé a la flaca en un destino que ni yo conozco. Pero que más da? Igual estoy podrido y ya me he visto en el espejo roto donde nada tiene forma e igual nada es sificiente. Solo soy un rebelde que no quiere aceptar su lugar en las filas infinitas del obrero que vive para trabajar. Por qué ya no tiene tiempo ni para existir como desea.
Todo a su tiempo dice mi viejo abuelo, con su mirada cansada y marcada por ese triste destino que nos tocó de no nacer en cunas de oro y con apeyidos que se han diluido tanto que ya solo se han hecho un conjunto de letras para saber exactamente a quién van a enterrar.
Ya ni siquiera tengo alcohol para perderme un rato. En mi resaca y levantarme como si nada hubiese pasado.
Hay veces que se me olvida lo pendejo que puedo llegar a ser. A meter las manos al fuego por un amigo, a gastarme todo el dinero con tal de compartir un buen ratito con alguien. A incluso a veces ver más por los demás que por mi mismo. Y para colmos parece que me encanta asolearse a lo bestia. Espero esto me quede grabado en la mente y en el cansancio de los pies para no andar haciendo estás pendejadas otra vez. A partir de qué estoy solo solo soy yo y lo demás tendrá su tiempo a su momento y al que no le guste que se busque otro pendejo que lo anteponga sobre sus pendientes.
