Hace tiempo que no ando por aca, no es que me esté sintiendo menos mal. Creo que estoy llegando a una etapa en la que el cuerpo ya se curte, y empiezas a tener cierta resistencia a las decepcionas cotidianas.
Las preocupaciones en mi mente por ahora son mas a cortos plazos. Debo mudarme de nuevo, esta vez me iré ligero. Y aunque algo decepcionado, pero no mal acompañado. Y pues resignado. Creo que he crecido lo suficiente para estar completamente solo y en la tranquilidad que desde hace tiempo; tambien siento que merezco. Me he estado replanteando algunas realidades en las que pensé que vivía. Me asombra como todo al final son como matemáticas (al menos en concepto) aplicado en diferentes maquinarias que componen todas las realidades.
Es como si el entorno de una ciudad es una gran maquina, la cual funciona gracias a pequeñas piezas dentro de ella. Estas piezas en su interior a su vez tienen más piezas a modo de engrane, que repite esta secuencia hasta dimensiones actualmente imposibles de percibir siquiera.
Ahora alejando la lupa, y descubro que incluso el no querer ser parte de la máquina. Me hace parte de la misma Solo que en otra área. En fin.
Se agota el tiempo, debo terminar de reparar unos pendientes que dejé para prevenirme de esta situación.
No quiero ser un castillo que se derrumba, que se derrumba... que se derrumba...
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